Tan imperfecto como perfecto para mí.

Ya se que no es perfecto, ni lo ha sido, ni lo sera, pero tampoco lo esperaba ni espero que sea perfecto, porque creo que lo que más me gusta de él son sus jodidos defectos, todos y cada uno de ellos, como el que a veces sea tan soso y como que a veces le falte demostrar lo que dice. Y lo aguanto, joder, lo aguanto, eso es amor, que te duelan sus defectos porque te matan pero que los ames y los aceptes solo porque le quieres y no permitirías perderlo por la estupidez de quejarte de uno de sus defectos que lo hacen único. Y es que él es  jodidamente y perfectamente imperfecto.